Empezamos a tocar: maracas, cencerro y plenerxs. La corille sandungueando de lau a lau, jayaera a flor de pieles y sudores. Nuestres hombros se menearon al son de leidi gaga en plena y soneos cuirs que resonaban sin plegaria ni devoción. Entrega total al disfrute en espacios mágicxs autogestades por les mismes cuerpes que le gozaron moviéndolx todx.
Si algo hemos aprendido a son de tumbao es que estxs espacios que tanto nos cuestan construir son les mismes que nos tocan defender y proteger. Ante la mera amenaza que corrompa nuestra brujería transfeminista consentida, habrá respuesta inmediata, sin permisos ni perdones. Y así nos vimos en la Tocaera Navideña, une parrandeo sin igual que formamos en corillx y en conspisanación. Belles seres nos encontramos en unx parking de la metrópolis sanjuanera con la tarea de pasarla cabrón y rescatar tradiciones en formas que nos sirvan pa’ las gozaeras libres de odio y opresión.
Tocamos, bailamos, reímos y nos jayamos sin control ni represión. Perriamos hasta abajo y compartimos sopón. Ya en la madrugada nos tocó sacar a quien se reveló como amenaza a la energía colective, y pues le hicimos. Luego de observar conductas machistas* y escuchar sobre acercamientos indeseadxs, nos comunicamos y nos dejamos sentir. Dialogamos sobre posibles formas de coexistir en ese espacio pero, ante oídos sordos, nos reafirmamos. ¿Justificarnos? Ni pa’l carajo. Coridefensa sin titubear*. Decidimos en comunidades no tener que explicar ni tolerar; que tus privilegios de hombre blanco cis aquí no valen na’ ni tu flow de machoman. No hay chance para más provocaciones (triggers). Desde la amor que nos tenemos, salvaguardamos, a toda costa, lxs espacios libres, segurxs, inclusivxs y diversxs que gestamos con las pieles.
En comunidades decidimos que creemos en lxs acuerdos colectives como base de nuestras relaciones. Parte de esxs acuerdxs son la autodefensa y la no tolerancia a los agresores en nuestres espacios. ¿Qué es la autodefensa o coridefensa? En la tocaera navideña se materializó en la necesidad de sacar de allí a un hombre blanco cis que no entendió lxs límites trazadxs por las personas que estaban y que le pidieron, tanto de manera individual como colectiva, que detuviera su comportamiento. ¿Cuál es la métrica de la violencia? ¿No basta con decir “para, ya, me incomodas”? Para nosotres, parte esencial de la coridefensa son lxs acompañamientos, bakiarnos*. Por esx, nos parece vital que nos defendamos en comunidades, que entre muches cuerpes podamos amortiguar las violencias, que lxs cantazos no caigan siempre en lxs mismxs laus, que así como nos indignamos en las redes sociales, asumamos responsabilidades colectivas por lxs espacios que ocupamos/creamos...no somos lxs más fuertes ni lxs más feministas ni lxs más radicales, tenemos ganas de amor y confianza ante la necesidad urgente de hacer aquellx que decimos, que creemos, que necesitamos. Porque así como apalabramos lx que disfrutamos, queremos apalabrar lx que no también, para sanarle...para que no tengamos que seguir viviendo lxs mismxs patrones, para identificarle cuando le veamos/sintamos, para comunicarle, para reconocerle y transformarle.
¿Por qué hablar de nuestra experiencia y no citar a algún académico de renombre? ¿Cómo es que tenemos la osadía de narrar la violencia que involucra a la gente que conocemos/queremos? En muchas ocasiones somos cuestionades por ejercer la práctica de cuidarnos y liberarnos, de defendernos y protegernos. Nos hace falta escuchar/leer más nuestras historias de resistencias. Conocer a nuestres ancestres y cómo le hicieron para estar aquí, vives y jayexs. Explorar nuestras batallas y cómo bregamos en solidaridad pa’ conectar. Conocernos. Nuestras comunidades somos nosotres. Si no nos tenemos, ni nos confiamos, ni nos apoyamos, sino asumimos responsabilidades ni nos comunicamos, ¿cómo le hacemos? ¿cómo seguimos? No tenemos todas las respuestas, son conversaciones que tenemos que tener...
A tode le corille espicy, a les parranderes de la Tocaera Navideña, a quienes regalan abrazos, besos, miradas y sus existencias resistencias. A quienes pusieron la cuerpa, incluso bajo lluvia y gritos, pa reafirmar nuestre derecho a existir en paz. Por todes, por tenernos en la jayaera y en la chonkiaera, en la casa y en la calle, en lxs paris, en la playa, performeando, en lxs ríos y mogotes, en la sanación y lxs masajitos. Por reconocernos y extender puentes, por responsabilizarnos, por confiarnos y encender estrellas. Les amamos. Nos amamos. Y, en definitiva, #NosTenemos. Nos vemos en la próxima tocaera. #CoridefensaTransfeminista #AutodefensaTransfeminista #ConspiSanando #EspicyNipples #CulturaTransfeminista #ParrandaCuir #TocaeraNavideña #CeroAlfaMachosCuir #SiTeSobrasTeQuedasteEnElGate #DejaElLloriPari #TransfeministMedia
Detallitxs:
- Conductas machistas (que se dieron en la parranda cuir): le dicen que no y continúa con la conducta; busca ser centro de atención a través de gritos, comentarios ofensivxs y pararse en el medio; ser agresivo en vez de reconocer y validar lxs deseos y expresiones de las demás personas; intentar convencerse a sí mismx (porque todes estábamos clarxs) de que la violencia no era ejercida por él, sino por otras personas al expresar que estaban en desacuerdo con sus miradas y pegaera y, por lo tanto, debía irse de ese espacio; entre otras acciones.
- Coridefensa: como escogemos decirle al reconocimiento colective de que las responsabilidades de lxs espacios son compartidas, no individuales. Defendernos de las violencias en corille. En reflexiones colectives cuestionamos el prefijo ‘auto’ de la palabra autodefensa y su atadura discursiva a lx individual. Así que, nos preguntamos cómo podemos apalabrarle de manera colectiva desde nuestra realidad caribeña y nuestra forma de hablar, de ahí surge este término que queremos seguirle conversando y transformando. ¿Qué es? Para nosotres es, por ejemplo:, si vemos una situación de violencia buscar maneras seguras y colectivas de intervenir y no simplemente pichar (ignorar), identificar y detener procesos de revictimización como la necesidad constante de que lxs sobrevivientes narren sus experiencias de violencia para que se les valide, priorizar y canalizar procesos de sanación colective partiendo de cómo le necesitemos y entendamos; y seguimos...
- Bakiarnos: las artes de apoyarnos activamente cuando nos necesitamos de las maneras en qué necesitamos y con lxs recursos colectivxs que tenemos. Por ejemplo, asistir al show de tu amigue drag, darle share a lxs contenidos de EspicyNipples, acompañar y apoyar a lxs sobrevivientes de violencia en sus procesos de denuncia y sanación, entre otres.
- Agradecemos a Zulam Petró Garlop por compartir las palabras que titularon este escrito
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